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Kimberly Mujica y su experiencia de intercambio “Lo que viví, sentí y experimenté no se puede poner en palabras”

30 de Noviembre 2023

Kimberly Mujica, estudiante de cuarto año de Periodismo, realizó un intercambio estudiantil a la Universidad Pontificia de Salamanca.

¿De dónde sale esta idea de realizar el intercambio y cuál fue tu motivación para realizarlo?

Es una idea que viene desde mi adolescencia, siempre me llamó la atención realizar un intercambio y todo lo que esto implicaba. Me sentía atraída con la simple idea de conocer otras culturas, aprender idiomas e incluso llegar a compartir con personas de diferentes partes del mundo y conocer de primera mano historias escondidas en rinconcitos del mundo.

Era mi sueño de adolescencia realizar un intercambio, pero lo fue mucho más cuando comencé a estudiar periodismo y darme cuenta que la mejor forma de aprender era atreverse y luchar por las metas de uno. Esto significaba desprenderme de mi zona de confort e ir al otro lado del mundo.

Desde que pasó a convertirse en un hecho el intercambio, mi motivación tenía un objetivo específico que era expandir mis conocimientos y crecer tanto personal como profesionalmente.

¿Cómo fue el proceso de seleccionar la universidad a la que querías ir?

Fue un proceso de extensa investigación y de tomar decisiones importantes, dado que habían muchas universidades dentro del proceso y la lista de países lo era aún más. El programa PME me ayudó con la información general para concretar mi decisión, como cuál convenio realizar, los documentos que necesitaba y cada paso que debía seguir hasta la carta de aceptación.

Me ayudó mucho conversar con gente que ya se había ido de intercambio, tener su punto de vista y saber de primera mano cómo se vive toda esta experiencia. Con las conversaciones que tuve con compañeros, que ya se habían ido de intercambio, opté por elegir al viejo continente, específicamente España, como base de mis estudios.

Para elegir la universidad me fijé en aquella donde pudiera convalidar el máximo de ramos posibles y que tuviera un buen plan de periodismo y comunicaciones. Así mismo, que fuera una universidad con prestigio en la zona y que se encontrará accesible tanto geográfica como económicamente.

Es así como llegué a la Universidad Pontificia de Salamanca, una universidad que goza de unas instalaciones maravillosas de plató de tv y estudios de radio. El plus es que se encuentra en la Provincia de Salamanca, ciudad que alberga a cientos de estudiantes de intercambio y erasmus semestre a semestre, por lo cual la comunidad universitaria de la ciudad es bastante diversa y las actividades que se realizan en el sector son de gran agrado para los que vamos de paso.

¿Cómo crees que esta experiencia influirá en tu formación académica?

Es maravillosamente impresionante como esta experiencia te hace crecer de formas que no creías.

En la parte académica conocí y experimenté diferentes formas de hacer periodismo, pude jugar con mis conocimientos y mis habilidades en radio, tv y prensa escrita.

Logré una mirada más subjetiva en cuanto a medios de comunicación y su manera de operar. En Madrid visite las dos cadenas de radio y medios comunicacionales más importantes de España, Cadena COPE y PRISA Media. Estuve en cada uno de sus plató y switch, recorrí sus pasillos y pude conversar con mis futuros colegas, quienes con un humor bien español nos comentaban cómo era trabajar para estas grandes cadenas.

En PRISA Media compartí con Aimar Bretos, un reconocido periodista español, quien nos invitó a participar de su programa radial y ser parte de su audiencia en directo. Bretos se dio el tiempo de escucharnos, así mismo, nos brindó palabras de aliento para luchar por lo que queremos ser en los medios de comunicación, nos regaló grandes consejos y unos truquitos para lograr ser un buen comunicador.

Sin dudar fue una oportunidad increíble, pude estar en el estudio de Los 40 como también en el plató de Hora 25 de CADENA SER. Una experiencia única e inolvidable que quizás para algunos es hasta un sueño.

Respondiendo a la pregunta, esta experiencia cambió mi forma de comunicar, de entablar conexión con las personas y por sobre todo de escuchar a la audiencia. Lo aprendido en el intercambio influirá en mi día a día, como cuando estoy frente a una cámara lista para un despacho o cuando me encuentro haciendo una escaleta e ir al aire en radio.

Lo bonito es que a raíz de lo vivido estaré siempre tratando de ser la mejor comunicadora posible, sin importar donde esté ni a donde vaya.

¿Qué cosas destacas y/o resaltas de tu experiencia estudiando en el extranjero?

Destacó por sobre todo lo mucho que uno crece cuando te vas de intercambio. Vas de cero a mil en cuestión de segundos. Atreverse con todo para lograr lo que alguna vez soñaste.

Mi paso por Europa fue realmente significativo, conocí gente muy bonita quienes me adoptaron como parte de su familia y me enseñaron a disfrutar de cada uno de los momentos que la vida te brinda como también a entender que si las cosas no funcionan es porque el destino tiene cosas mejores por ofrecer. Créanme cuando les digo esto .

Tuve la oportunidad de viajar a los parajes más románticos, fiesteros, mágicos y de ensueño que uno solo ve en películas.

Arriba de London Eye viendo esa ciudad de ensueño en su máximo apogeo, encontrarme sentada con una copa de vino frente a la Torre Eiffel, estar de fiesta con Ben Brereton en Ibiza, caminar por las antiguas calles de Alemania o conocer el coliseo romano y estar pidiendo un deseo en la Fontana Di Trevi fue algo que ni en mis mejores días pensé que podría lograr.

Lo que viví, sentí y experimenté no se puede poner en palabras. Simplemente me queda decir que te sientes con el alma y corazón lleno luego de estar rodeada de tanta cultura, experimentar un montón de gastronomía, paisajes fascinantes, ver piezas de arte históricas, pasear por palacios y lugares con tanta historia que, todo lo vivido es un regalo que te lo guardas para toda la vida.

¿Qué fue lo más complicado durante este periodo lejos de Chile?

Lo más complicado fue estar a más de 10.000 kilómetros lejos de la familia, sentir a veces la falta de un abrazo o un beso de madre o padre, o el llegar a casa y tener una conversación con mi hermano o juntarnos los fines de semana con mis abuelos y tíos para un asado o almuerzo familiar. Sin embargo, son cosas que vienen de la mano cuando tienes este espíritu aventurero de realizar un intercambio al otro lado del mundo.

Siempre causará un ruido el salir de la zona de confort que te proporciona tu país y tu cultura, pero no es algo imposible ni un sentimiento que dura todo el tiempo. Conoces personas maravillosas que se convierten en tu familia durante un periodo determinado pero que logran un cambio y recuerdo permanente en ti.

¿Cuál sería tu consejo para quien está pensando en irse de intercambio?

Que se atrevan y se aventuren a lo desconocido. ¿Puede ser difícil? Claro, pero todo lo que es difícil de conseguir luego se disfruta con toda la intensidad.